Esta sencilla frase que aprendí de un hombre visionario; sin lugar a dudas marcará mi destino; hoy que la vida me da la oportunidad de conocer a las personas que dirigen los grandes proyectos, económicos, políticos y sociales de nuestro pueblo; he podido darme cuenta que vivimos en un momento donde es posible, organizarnos para lograr nuestros mas preciados anhelos; pero no falta quien vende sus ideales y entrega a sus amigos a cambio de dadivas; los hombres de valor y convicciones firmes no podríamos traicionar las esperanzas de quienes confían en nosotros y de aquellos que noblemente deciden apoyar los proyectos de beneficio colectivo que abanderamos. Cuando eres honesto y sabes del valor de la lealtad, comprometes tú destino al de los hombres que te brindan su confianza al darte la oportunidad de crecer bajo su égida. Entonces te vuelves uno con tu equipo y corres la misma suerte, como aprendimos de Alejandro Dumas, en su heroica novela de los Tres Mosqueteros: “Todos para uno y uno para todos”; Así y solamente así, es posible llegar a ver tus sueños convertidos en realidad; pero quien en su alma no guarda mas que el sentimiento de un traidor, correrá como loco, negando a su señor tres veces antes de que el gallo cante; no olvidando que son las ratas las primeras que abandonan el barco cuando se hunde; porque en el tiempo de adversidad se conoce a los amigos y cuando las cosas salen mal, no verás contigo mas que a los que de verdad te aprecian y te respetan; en política esto es cotidiano, cuando eres candidato u ostentas el poder estas rodeado de zanganos, murciélagos chupa sangre, que solo sirven para aplaudir, y decir a todo ¡si, señor!, ¡como usted ordene!; pero sacan el cobre en tiempos de vacas flacas y se refugian aún con quienes consideraban sus enemigos tradicionales, de esos judas debes cuidarte, porque no son fieles ni a si mismos; mas lo es un perro que no te abandona como estos fariseos que serían capaces de vender a sus viejecitas, con tal de no sufrir cuando su turno llega; cuídate de los ambiciosos, ignorantes e hipócritas que te rodean, pues son muchos los llamados pero pocos los elegidos y con la experiencia que te da la vida deberás darte cuenta que aquel que mas lealtad te jura, guarda una daga bajo su manga, para ser el primero en apuñalarte cuando la suerte no te haya favorecido; los que cambian de color y de equipos como cambiar de calcetines, son también repugnables; cuando esos bandazos son producto de la codicia, de la malicia o de la perversidad; pero no es el caso de aquellos jóvenes que comienzan a vivir, quienes tras el cumplimiento de un ideal buscan incansablemente a sus iguales y no descansan si no hasta haber encontrado otras almas que vibran con intensidad similar; pues habiéndolas localizado saben subordinarse, por bien del equipo que unido es capaz de lograr esas transformaciones sociales, que los pueblos demandan de sus lideres naturales; a pesar de que los contrarios por defender sus mezquinos intereses personales, por atacarlos les llamen despectivamente “caciques”; La vida es la mejor maestra para quien desea aprender, solo falta un maestro y un alumno; binomio perfecto que historicamente ha demostrado puede en verdad mantener encendida la llama de los conocimientos ancestrales que solo se transmiten de boca a oído y no es posible que los adquiera el vulgo, porque el Cristo prohibio arrojar margaritas a los cerdos; en cambio cuando tienes la dicha de encontrar a un maestro de vida o la oportunidad de descubrir a un alumno con la fortaleza y sensibilidad suficiente para entender tus consejos; se da el milagro de la regeneración del pensamiento y se transmite pacíficamente el poder; así nos lo enseño Sócrates que durante mas de veinte años tuvo consigo bajo su tutela y sabios consejos al ilustre Platón, quien pago justamente ese beneficio que le dio la existencia enseñando y protegiendo al augusto maestro Aristóteles, quien a su vez, transmitió su enseñanza al Conquistador Alejandro Magno; ese ciclo de la vida nos ilustra respecto de esta verdad incontrovertible; “si no sabes aprende y si sabes enseña”; pero solo los hombres de sensibilidad superior buscan la persona idónea de acuerdo con sus Aspiraciones para crecer bajo su tutela a cambio de lealtad y compromiso; depende entonces del maestro reconocer a las persona que merezca ese don; puliendo el obscuro carbón hasta convertirlo en un diamante pulido. Quien tenga oídos que escuche y quien tenga ojos que vea; por mi parte, Doy gracias al creador, por permitirme admirar la belleza del mundo y conocer a los hombres que están haciendo historia en nuestro Mundo.
"El Deber de un Hombre es estar ahí, Donde es más Útil".
J. Martí
1 comentario:
Admiro y seguiré admirando, los hombres que son fieles, a sus ideas y que la tolerancia es una sabiduria de convivencia social y sobre todo, hombres como tu que entienden que juntos tenemos mas poder, para mejorar las cosas
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